La Estrella
La Estrella. La carta de la Estrella del tarot nos presenta
una mujer desnuda, se trata del primer cuerpo desnudo en los arcanos mayores. La
mujer parece que está a punto de bañarse desnuda, lo que simbológicamente puede
relacionarse con las ideas de purificación, limpieza y vulnerabilidad que desea
transmitir esta carta.
Después del derrumbe de la torre, en que el orgullo ha caído,
ahora empieza una nueva etapa, un momento de recuperación y balance. Es la hora
de estar libre de apego, de abrirse a las emociones y de no ocultar nada. Es un
momento en que todo es revelado, tal y como muestra la desnudez de la carta.
Sobre la mujer aparece una estrella, la cual se asemeja a la rosa de los vientos que aparece en mapas antiguos, o también a la estrella de Belén, las
cuales nos sirven de guía en nuestro camino. Su posición central también puede
referirse al sol, mientras que las siete estrellas restantes hacen referencia a
los siete planetas de la antigüedad. La estrella se nos presenta como una
orientación, así como el punto de central de nuestro ser, el self, en este
sentido nos comunica que para orientarnos y saber hacia donde vamos, primero
debemos descubrir quienes somos. La estrella es la guía espiritual que llevamos
dentro, la cual nos conecta con algo que va más allá de nosotros. Es el momento de pensar cómo estamos posicionados en nuestra vida, y hacia donde nos queremos dirigir, pero para ello es importante conocernos y saber aquello que es importante para nosotros.
Siguiendo una interpretación más mística, podemos ver en la
estrella central de la carta un símbolo de la conciencia divina o cósmica,
mientras que las siete estrellas alrededor son su reflejo en las mentes individuales. Las energías cósmicas fluyen hacia la realidad terrenal.
Después de la oscuridad de la Torre y el Diablo, la Estrella
nos invita a dejar de fingir, a conectar con aquello más genuino en nosotros. Es
un momento en que podemos sentirnos más vulnerables, al habernos despojado de las
máscaras, pero también más sinceros con nosotros mismos. Es una carta que nos
conecta con la empatía hacia nosotros mismos, y hacia el resto de personas.
El agua, un elemento muy presente en esta carta del tarot,
nos remite a la pureza de emociones y sentimientos, así como al bautismo, un
ritual donde se renace y donde podemos aprender de las experiencias pasadas. El
agua en esta carta es derramada, a diferencia de la carta de la Templanza,
donde se mantenía recirculando. Aquí el agua nos habla de abundancia, el agua no
está contenida, se redistribuye con el objetivo que fructifique y nos lleve a
un crecimiento, hay esperanza y entrega por parte de la mujer en favor de un
futuro prometedor. El líquido que surge de las vasijas puede interpretarse como
una señal de generosidad.
La mujer de la carta vierte aguas en un arroyo y otra en la
tierra, se considera esta imagen como una expresión de la separación entre los
contenidos personales de nuestra conciencia y los contenidos arquetípicos, es
una señal que no estamos solos, compartimos un futuro común con la humanidad. La
Estrella del tarot nos habla de un momento de toma de conciencia, en que se
comprende que existe un propósito más trascendente, que nos guía, al cual solo
podemos llegar vinculándonos con otras personas. Cuando nos dejamos guiar por
aquello más genuino de nosotros, otras personas también se unen en este propósito.
El número 17 de la carta nos remite por suma al 8, a la carta
del tarot de la Justicia, indicándonos que podemos enfrentar las situaciones de
la vida con confianza en el futuro (en la estrella que nos guía), siempre que
lo hagamos siendo justos con nosotros mismos y cosechando lo que hemos
sembrado, tal y como nos dice la Justicia.
La Estrella expresa esperanza, un sentimiento de curación e
integración, especialmente después de tormentas emocionales. Nos aconseja
conectarnos con nuestra alma, prestando más atención a lo que nos pide la vida.
Es una carta de calma interior, no de acción, los tiempos son lentos, un
mensaje de esperanza que nos invita a dejar fluir las cosas, a no forzarlas y a
confiar en que nuestra estrella nos señalará el camino correcto.
Algunos autores han relacionado las siete estrellas de la
carta con las Pleyádes o Siete hermanas, un cúmulo de estrellas. En la
mitología griega, las Pléyades eran siete hermanas ninfas que atrajeron la
atención del cazador Orión. Para salvarlas de su persecución, Zeus convirtió
las ninfas en palomas, las cuales volaron hacía arriba y se convirtieron en
estrellas.
Leslie Beebe
Tarólogo y Terapeuta Barcelona
Tarot Barcelona
https://ansiedad-depresion-barcelona.blogspot.com/
https://sites.google.com/view/tarot-presencial-barcelona/p%C3%A1gina-principal
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